La izquierda latinoamericana es altamente crítica de la presencia militar norteamericana en la región. El discurso de esta izquierda es supuestamente condenar la intervención, especialmente militar, de toda potencia extranjera.

No obstante, mientras la izquierda bolivariana deplora la presencia militar de los Estados Unidos, ésta llega a estimular la cooperación y la intervención de potencias militares rivales de Estados Unidos como Rusia o Irán.

En el PanAm Post le contamos sobre la presencia del imperialismo ruso en la región.

Rusia en América Latina: más allá de la Guerra Fría

Durante la Guerra Fría fueron múltiples las formas en las cuales la Unión Soviética buscó penetrar en la región. La más peligrosa y conocida casi lleva a una Guerra Mundial: la crisis de los misiles.

Además de armar y proteger a la dictadura cubana, la Unión Soviética financió y ayudó a la formación de diversas guerrillas marxistas. La región sufre hasta ahora las consecuencias de la existencia de guerrillas comunistas.

Pero el apoyo al marxismo por parte de la Unión Soviética iba más allá de lo moral. La URSS financiaba emisoras, institutos de pensamiento, partidos comunistas y centros culturales (de Rusia, sus satélites y también de marxismo). Varios de los líderes de las FARC estudiaron en la Unión Soviética.

Con el colapso del socialismo soviético, el imperialismo ruso en América Latina se fue debilitando. No obstante, tras la llegada de Vladimir Putin al poder en Rusia en el año 2000, Rusia volvió a promover sus intereses en la región de forma activa.

Compra y venta de armas

Desde el ascenso al poder de Hugo Chávez, el régimen bolivariano ha promovido la integración con Rusia. Por supuesto, uno de los ejes de la relación Rusia-Venezuela es el petróleo.

No obstante, el régimen venezolano también ha promovido el intercambio militar con Rusia. La razón fundamental de esta relación es que Chávez promovió una política exterior anti-Estados Unidos. En ese sentido, el régimen de Putin se acercó en términos militares al régimen bolivariano.

La relación militar entre el chavismo y el régimen de Putin se aceleraría en 2005 con la decisión de Estados Unidos de no vender armamento a Venezuela, debido a que según el gobierno Bush su par venezolano no apoyaba suficientemente la lucha contra el terrorismo. Sólo entre 2005 y 2008, Venezuela gastó 4.4 billiones de dólares en armamento ruso.

Desde 2008, 65 % del armamentocomprado por Venezuela fue adquirido desde Rusia. Chávez y Maduro compraron aviones, rifles, helicópteros, lanzaderas de misiles y hasta radares al régimen de Putin. Era tal la fluidez de la relación militar entre Chávez y Putin que el caudillo venezolano llegó a anunciar que el régimen de Moscú apoyaría la ambición nuclear chavista.

Hasta el momento Rusia no ha desplegado bases militares en Venezuela. No obstante, el régimen ruso ha realizado múltiples entrenamientos militares en territorio venezolano desde que Chávez decidió plegar el interés nacional venezolano a los intereses geopolíticos rusos.

Venezuela y Nicaragua: en defensa de los intereses geopolíticos rusos

La Rusia de Putin ha agredido militarmente a varios países. Georgia y Ucrania son países que hacían parte de la Unión Soviética y que Rusia había tratado como satélites. Sin embargo, debido al interés de algunos gobiernos georgianos y ucranianos de ser independientes con respecto a Rusia, ambos países han sido castigados por el Ejército ruso.

En 2008 el régimen de Moscú decidió atacar Georgia con el propósito de apoyar a las milicias separatistas de las regiones georgianas de Abjasia y Osetia del Sur. El régimen de Putin quería castigar la política exterior pro-europea y pro-americana del gobierno georgiano. Como producto de estas acciones, tanto Abjasia como Osetia del Sur declararon su independencia.

Rusia decidió apoyar abiertamente la independencia de ambas repúblicas así como promover su reconocimiento internacional. Sólo tres países, además de Rusia, reconocieron la independencia de Osetia del Sur y Abjasia: Venezuela, Nicaragua y Nauru.

En 2014,  el régimen de Moscú volvió a agredir a otro de sus vecinos. En este caso fue Ucrania, donde fuerzas militares rusas apoyaron primero la separación de Crimea, y luego, la adhesión de la entonces región ucraniana a Rusia. Tras la violación de la soberanía nacional ucraniana, el dictador Maduro respaldó la agresión rusa. Así cubrió el canal oficial del régimen ruso en español el apoyo del dictador de Venezuela a la anexión rusa de Crimea:

Incursiones militares en la región

Dada la ventaja militar rusa en el mundo, el régimen de Putin ha permitido incursiones militares de las fuerzas armadas rusas en otros países. Países como Noruega, Suecia, Turquía, Ucrania y Japón han sufrido la incursión ilegal rusa en sus territorios.

El régimen ruso también ha realizado incursiones militares en Suramérica. En 2013, aviones bombarderos rusos incursionaron en cielo colombiano sin permiso previo. Los aviones rusos que volaban de Caracas a Managua, fueron alcanzados por aviones de la Fuerza Aérea Colombiana que advirtió a los invasores sobre la situación. Desde luego, los pilotos sabían que estaban invadiendo territorio colombiano.

Dada la relación especial que tiene Rusia con Venezuela y Nicaragua, y las maniobras militares que realiza el régimen ruso en ambos países no resultaría extraño que una situación así se repita en territorio colombiano.

Los medios de comunicación rusos en la región

El régimen ruso no sólo se contenta con tener como aliados los regímenes venezolano, cubano y nicaragüense. El gobierno de Putin ha promovido la creación de varios medios de comunicación que defienden los intereses rusos en América Latina. Son los casos del canal de televisión Russia Today (RT), la agencia de noticias Sputnik.

Fuente: es.panampost.com