En un escándalo se encuentra la Agencia Antidroga de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) luego de que una investigación bipartita revelara que esta mitió sobre su rol en una operación antinarcóticos fallida en Honduras que dejó como resultado a cuatro inocentes muertos. Luego del hecho, la DEA habría intentado engañar al Departamento de Justicia así como a la población queriendo eliminar los rastros de lo sucedido.

Y es que elementos hondureños que se encontraban bajo el mando de agentes de la DEA dispararon contra pasajeros no armados que se transportaban en un barco taxi en el mes de mayo del 2012, el resultado fueron cuatro personas muertas dentro de las que había dos mujeres embarazadas y un estudiante además de tres aldeanos más heridos de gravedad.

Con anterioridad, la DEA se había desligado de cualquier error cometido, sin embargo el reporte que fue publicado este miércoles por parte del insector general del Departamento de Justicia ha revelado importantes incoherencias en lo que se describió que sucedió en el hecho mencionado.

El tiroteo en mención sucedió a las 2:00 a. m., hora local, el 11 de mayo del 2012 en el río Patuca ubicado en las cercanías del pueblo de Ahuas al noroeste de Honduras. El blanco fue un barco de pasajeros con 16 personas a bordo que chocó con un barco encallado que transportaba agentes estadounidenses y hondureños así como importantes cantidades de cocaína incautada. Esta embarcación militar se encontraba resguardada por cuatro helicópteros del Departamento de Estado que portaban armas.

La DEA argumentó que los agentes hondureños dispararon contra la embarcación en defensa propia luego de haber recibido disparos, sin embargo, fueron los agentes los que dispararon primero, dentro de ellos un elemento de la DEA, además habrían apuntado contra pasajeros que se lanzaron de la embarcación al río para intentar resguardarse de los disparos. Luego, un agente de la DEA a bordo de uno de los helicópteros ordenó a un agente hondureño que se encontraba armado que disparara la metralladora desde el aire.

Hasta el momento no hay evidencias que demuestren que desde la embarcación de civiles se produjeran disparos o que los que se encontraban a bordo estuvieran involucrados en actividades de narcóticos, según detalla el reporte en el que también se indica que lo sostenido por la DEA se basa en una declaración inventada de una informante encubierta de la agencia estadounidense que eventualmente reconoció que mintió.

Por su parte la DEA repite sistemáticamente que la operación estaba siendo dirigida por Honduras y que sus agentes solo actuaron bajo las ordenes de sus similares del país centroamericano, sin embargo, el papel de agentes estadounidenses ha sido altamente cuestionado a lo largo de su involucramiento en suelo extranjero en operaciones antinarcóticos.

Por último, el reporte concluye que miembros del Departamento de Estado dieron al Congreso estadounidenses así como a la ciudadanía en general, información incompleta similar a la proveída por la DEA.

FUENTE: PAN AM