Según guardianes del Inpec, tres custodios  del instituto fueron llamados a presentar un informe luego de que se conociera que en la noche del pasado 31 de diciembre varios integrantes de las Farc recluidos en el patio 4 del edificio 1 de la cárcel La Picota de Bogotá hicieron una fiesta.

En ese patio se encuentran recluidos todos los guerrilleros de las Farc que por orden judicial fueron enviados a La Picota, entre ellos quienes están en proceso de ser indultados.

Cuando el director de la cárcel, Jorge Alberto Contreras, en compañía de uno de los comandantes de la Guardia, el capitán Chávez y algunos guardianes auxiliares, intentaron ingresar al patio para hacer una requisa y averiguar cómo había entrado el licor a la cárcel, los internos los amenazaron con arma blanca.

“Por el ataque se alcanzó a perforar la chaqueta que llevaba puesta uno de los auxiliares”, le contó uno de los testigos a EL TIEMPO.

“Ante el amotinamiento de los internos, el director se llevó a sus hombres, no solicitó apoyo del resto de los demás guardianes o del grupo de reacción inmediata, permitiendo que allí continuaran con la parranda”, agregó una fuente cercana al caso.

Aunque la oficina de prensa del Inpec confirma que esa noche sí hubo operativos de inspección a celdas, asegura que no hay una investigación por los hechos.

el tiempo.