Raúl Julio Escobar Poblete, exguerrillero chileno radicado en México, está vinculado con al menos cinco secuestros de alto impacto, dentro de los que se destacan el del exsenador del Partido Acción Nacional (PAN), Diego Fernández de Ceballos, así como el de la nuera del expresidente Vicente Fox, Mónica Jurado. Esta información fue confirmada por Patricia Bugarín Gutiérrez, directora de la Coordinación Nacional Antisecuestros.

El grupo delictivo vinculado a Escobar Poblete, también conocido como “Comandante Emilio”, estaría involucrado directamente con los raptos mencionados y otros más. Sin embargo, no se tiene certeza de ello, ya que no todas las víctimas pudieron haber denunciado el delito, por lo que Bugarín Gutiérrez exhortó a estas personas a acercarse a la Procuraduría General de la República (PGR) a hacer las denuncias respectivas.

“Raúl Julio Escobar está acusado de ser el autor material del asesinato del senador de la Unión Democrática Independiente, Jaime Guzmán Errazuriz en 1991. Por ese homicidio, el 12 de junio un ministro chileno solicitó a México la extradición del Comandante Emilio, cuya detención en Guanajuato se dio a conocer el 1 de junio pasado”, detalló la funcionaria.

Escobar Poblete formó parte en su país del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), guerrilla comunista que fue férrea opositora al dictador Augusto Pinochet. “Tenemos suficiente información para trabajar aquí la investigación, así que ese es un pendiente que está seguro, que el trámite está corriendo”, aseguró Bugarín Gutiérrez.

“Tenemos diferentes casos, no me atrevería a darlo porque forma parte del detallado de la investigación, pero estamos hablando de cuando menos cinco casos. Es un grupo de casos de alto impacto. También instituciones de otros países están colaborando”, aseguró la funcionaria.

Escobar Poblete radicaba en la ciudad de San Miguel de Allende, utilizando el nombre de Ramón Alberto Guerra y decía que era empresario. La banda delictiva a la que se le vincula operaba en el centro del territorio mexicano en estados como Puebla, Hidalgo y Estado de México, sin embargo, su principal centro de operaciones estaba en Guanajuato.

Para realizar los secuestros la banda mencionada habría utilizado tácticas de guerrilla, y sus operaciones datan de hace más de 15 años, siendo su primer punto de operaciones la Ciudad de México, luego Puebla, para eventualmente asentarse en Guanajuato. Los rescates los cobraban en dólares y podían tener bajo cautiverio a sus secuestrados hasta un año o más, en el caso de Fernández de Ceballos, su secuestro se prolongó por siete meses.

FUENTE: PAN AM