El director jefe del Cuerpo Nacional de Policía de España, José Antonio Rodrigo, ha afirmado que narcotraficantes mexicanos están intentando instalarse en ese país específicamente en una de las zonas más exclusivas de Madrid, un lugar de tranquilidad en donde pueden pasar fácilmente desapercibidos.
El subdirector adjunto de la Agencia Tributaria de España, Ignacio Regueiro, indica que España puede tener muchas similitudes con México: “Tenemos lazos históricos y culturales que nos unen. La lengua es la misma”, sin embargo lo que llama la atención a los narcotraficantes no es la lengua ni la cultura del país europeo, sino la facilidad para lavar dinero proveniente de actividades ilícitas.
“España es un país atractivo, porque utilizamos la misma lengua, porque como ejemplo, se pueden adquirir numerosas viviendas, se pueden crear empresas de forma fácil y esos beneficios que se originan del tráfico de drogas se pueden blanquear”, indica Alférez Gustavo Castro, de la Unidad Técnica de la Policía Judicial, adscrito al grupo de drogas.
Actualmente en España hay cinco operaciones en proceso contra personas vinculadas al nacotráfico mexicano que pretenden lavar dinero ahí, según ha confirmado Castro.
En Madrid vivía Juan Manue Núñez Luévano, conocido como “El Mono Muñoz” quien fue detenido por la Unidad de Delitos Económicos y Fiscales de la Policía acusado del lavado de dinero procedente de actividades vinculadas al narcotráfico. Así como él, en los últimos dos años fueron detenidos 32 ciudadanos mexicanos por este mismo delito.
A España no llega mucha droga proveniente de México, sin embargo, este es el primero punto en donde se ubican los estupefaciente para ser distribuidos por Europa.
“Los cárteles mexicanos en España suelen a ver una persona, en la mayoría de los casos suele ser un español, en el que tiene una clientela o clientes fijos en nuestro país, aquí en España. Sin embargo, recibe a lo mejor esas sustancias estupefacientes, de diferentes cárteles de México”, detalla Castro.
Por su parte Araceli Manjón, catedrática de Derecho Penal de la Universidad Complutense de Madrid, explica: “Dándose la circunstancia de que estemos, no sólo ante el capo del cártel, sino ante los jefes de las organizaciones que tienen alguna función directiva, estaríamos hablando de unas penas por encima de los 20 años”.
Tanto la Policía como la Guardia Civil se encuentran investigando la presencia de presuntos narcotraficantes mexicanos en la Península Ibérica, ya que el atractivo que tiene España para los mencionados delincuentes es evidente, sin embargo la policía está esforzándose por demostrar eficacia.
FUENTE: PAN AM
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