En palabras de la exnuera de Gustavo Petro, el narcotraficante que purgó una pena de más de 20 años de prisión en los Estados Unidos Samuel Santander Lopesierra – conocido con el alias de ‘El hombre Marlboro’- entregó una gruesa suma de dinero en efectivo a su exesposo y primogénito del presidente de Colombia, Nicolás Petro Burgos.

Daysuris Vásquez ratificó que “Nicolás Petro le recibió dinero a ese señor [Lopesierra], más de $600 millones de pesos para la campaña del papá. Eso nunca llegó legalmente a la campaña porque él, Nicolás, se quedó con ese dinero”.

Al revisar los empolvados expedientes del proceso 8.000 se descubre que, en la narcofinanciación de la campaña de Ernesto Samper, también participó de manera muy activa ‘El hombre Marlboro’, con una coincidencia adicional: el dinero que él aportó para las elecciones de 1994 también fue robado, aquella vez por el propio Samper.

Uno de los tristemente célebres narcocassettes más nauseabundos es el que contiene una conversación entre Ernesto Samper y la narcotraficante Elizabeth Montoya, conocida como ‘la monita retrechera’.

En la charla, la mafiosa le dice a Samper: “vea, no le vaya a comprar nada de regalo a la señora [en referencia a Jacquin de Samper] que yo le tengo mañana el regalo listo”. El candidato liberal le responde que le angustia que su esposa descubra que él no escogió el obsequio, a lo que su interlocutora le responde: “…no lo vaya a comprar porque le mandé un anillo, pero precioso, de un diamantico muy lindo”. Samper reacciona diciéndole “!Ay!…tan divina”.

Pero el propósito de esa charla no era para hablar de gemas sino de aportes oscuros a la campaña. La monita le confirma a Samper que las “personas” ya están en Bogotá y que están listas para reunirse con él al siguiente día.

Los supuestos empresarios, según Montoya, eran los presidentes de una entidad llamada “Interbank”. Samper expresó que tenía problemas de agenda, razón por la que era mejor que la reunión tuviera lugar a primera hora de la mañana en su apartamento privado.

En el libro La verdad sobre las mentiras, el tesorero de la campaña de Ernesto Samper reveló lo que realmente sucedió y quiénes eran las personas que ‘la monita retrechera’ llevó a la casa del entonces candidato presidencial.

“La historia es así. Un día, en plena campaña electoral, Elizabeth Montoya de Sarria visitó a Ernesto Samper Pizano en su apartamento en Bogotá. La ‘monita’ llegó con un maletín de cuero negro y, después de la charla y los chistes de rigor, se lo entregó al candidato: contenía 500.000 dólares en efectivo. Cuando Elizabeth salía del apartamento de Ernesto, yo entraba. Nos encontramos en el ascensor. Ella iba a acompañada del coronel Osorio, a quien Samper había encomendado recoger a la ‘monita’ en su casa, traerla hasta su apartamento y llevarla de vuelta… Cuando entré al estudio de Samper vi sobre el escritorio el mismo maletín que la noche anterior yo había visto cómo empacaba Elizabeth, en su casa, con el dinero. Samper no hizo mención de esa plata en ese momento, ni después; nunca dio cuenta de ella. Cuando le comenté a Fernando Botero acerca de dinero con el fin de utilizarlo en los gastos de campaña, me dijo que Samper jamás le había hablado de él. Ese dinero hacía parte de un jugoso aporte del parlamentario Santa Lopesierra y los hermanos Manzur…”, se lee en las páginas 79 y 80 del libro de Medina.

No deja de ser paradójico que los dineros oscuros que Lopesierra donó a las campañas de presidenciales de 1994 y 2022, en ambas ocasiones, haya sido robado por el candidato -Samper- o el hijo del mismo -Nicolás Petro-.

El medio millón de dólares de Samper nunca fue entregado a quienes estaban administrando los ríos de dinero en efectivo que manejó esa campaña, y los $600 millones de pesos de Petro terminaron en la compra de la mega mansión que el hijo del hoy presidente de Colombia adquirió en Barranquilla.