Tras dos jornadas difíciles para el Gobierno de Mauricio Macri, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, se presentó ante los medios minutos antes que abra el mercado cambiario. Sus anuncios buscaron enfriar la escalada que llevó al dólar a los 23,30 pesos y calmar los ánimos ante rumores de una posible corrida cambiaria.

Junto al titular de Finanzas, Luis Caputo, Dujovne informó en una conferencia en el Palacio de Hacienda que habrían cambios en el plan fiscal para 2018. Entre lo más destacado, se puede mencionar la nueva meta fiscal, que para los ministros se podrá reducir de 3,2 a 2,7 puntos porcentuales del PIB. El corte en el rojo del fisco, de poder traducirlo a los hechos, significaría un monto nada despreciable de USD $3.200 millones.

El anuncio puede ser leído como un “golpe” al esquema gradualista, ya que el cambio de meta fiscal es un tanto ambicioso. Cabe destacar que a finales del año pasado, el Gobierno decidió “relajar” las metas monetarias y bajar la velocidad en la lucha contra la inflación. Ambos escenarios, técnicamente, podrían ser contradictorios. De la misma manera que las metas fiscales laxas del principio del macrismo no eran compatibles con las metas monetarias duras, el Gobierno debería tomar nota que el camino inverso también podría traer dificultades. Muchos analistas critican estos cambios constantes de rumbo, que lo asocian a una falta de estrategia y a una peligrosa improvisación.

La presentación técnica, que buscó generar un impacto al inicio de la jornada cambiaria, también tuvo tiempo para las apreciaciones de índole política. “Argentinapese a las presiones populistas no está dispuesta a sesgar en su camino hacia el equilibrio fiscal, ha decidido adoptar este conjunto de medidas fiscales para acelerar la convergencia”, afirmó Dujovne. El ministro también hizo referencia a los proyectos de la oposición que buscan “congelar” las tarifas, para detener el aumento de los precios. Según Dujovne estas medidas agravarían el déficit fiscal y son “irresponsables”.

Apertura del mercado de cambios, en baja

Al menos, por ahora, el anuncio tuvo un efecto positivo para el Gobierno, ya que la moneda norteamericana bajó 80 centavos y se negocia, a estas horas, a 22,50. La cotización trajo paz en un momento complejo, ya que en solo 48 horas el incremento fue del 12 % y los rumores de crisis de confianza y una posible corrida cambiaria generaron altos niveles de incertidumbre. El fin de semana traerá algo de tranquilidad para el equipo económico, luego de un anuncio que consiguió su objetivo.

Junto al bolívar venezolano, de las peores monedas del mundo 

El peso argentino, luego de la caída de las últimas horas, se convirtió en la moneda más castigada del planeta en la primera semana de mayo. Entre las monedas más vulnerables en lo que va del año, el peso comparte un podio negativo junto a la lira turca, moneda que también sufre constantes devaluaciones. Pero en lo que va de 2018, en estos cuatro meses el bolívar venezolano continúa siendo el peor signo monetario a nivel global.

Fuente: Panampost